jueves, 17 de mayo de 2007

de Saetas...


En las últimas retransmisiones semanasanteras de esta nuestra ciudad, hemos tenido la oportunidad de observar un fenómeno digno de estudio (para el que tenga tiempo y dinero) o de comentario y reflexión (mi caso, mas parco en lo anterior) que es el de la presencia de saetas y saeteros en Salamanca.

El objeto de reflexión es la insistencia en definir "desde arriba" el fenómeno de la Semana Santa en Salamanca, tanto de los puristas que defienden a capa y espada la raíz castellana de nuestras hermandades (una evidencia de la que soy firme defensor) como de los "innovadores" que se agarran al "aqui no hay tradición" para meternosla doblada con cachivaches, modas, tendencias, andaluzadas y demás inventos variopintos. Ni hay que buscar una sobriedad a la zamorana, digamos sin saetas, ni meternos en oropeles ajenos que ningun bien pueden traernos. Esto es como es. Salamanca y punto. A lo que iba.

Me refiero a TVS porque lo tengo fresco en la memoria, lo he visto varias veces y porque a todos nos entra nsotalgia de los dias santos cuando todo ha acabo y el que más y el que menos se pone un DVD o se oye una marchita. El Lunes y Martes Santos, en presencia de las cámaras, se oyeron saetas. Una, de nuestra querida Soledad Calderón, que lleva taitantos años al pie del cañón y cada año lo hace mejor y con mas gusto. No se prodiga tanto como antes, y se escoge mejor. Me gusta. Este año ha compartido cartel con otro saetero, que he oido mas años - seguro que algún lector conoce el nombre - que no lo hace mal tampoco, pero me dió la impresión de buscar la camara en ambas retransmisiones, ponerse en el camino de la procesión y forzar la parada del paso, y algun detallito más que no me convenció.

Hay que decirle a mis queridos comentaristas Luis Felipe y Javi, que en Salamanca, se cantan saetas. Y que no es un importación de ningún sitio. Muestran esa parte tan charra arraigada al Flamenco, a los Toros, y por supuesto, a la Semana Santa. Con cariño...

Tenemos imagenes del genial Rafael Farina cantando saetas en la de las 5 de la mañana, del mitico Legionario haciendo lo propio, hace 40, 50, 60 años... y al público le gusta. A mi me gusta ir bajo el capuchón y escuchar como le cantan a mi Cristo de los Doctrinos, a mi Jesús del Perdón, a mi Virgen de la Soledad. En la foto que acompaña este texto, de Fernando Santos, se ve al Legionario cantando al Cristo de la Agonía en una tarde de Jueves Santo de, probablemente, 1975









Algunas cosas no me gustan: que la gente y muchos cofrades piensen que el flamenco es cosa de gitanos y andaluces -cuando es un arte en si mismo, aunque beba de las fuentes del cante tradicional de Andalucía, pero también del canto arabe y de la copla española del S. XVIII - y cataloguemos a la saeta dentro de esas importaciones a las que me refería, cuando nada tiene que ver. Otro caso que me disgusta, es que los pasos se detengan ante el cante de una saeta... los pasos, especialmente si la procesión es seria, y todas, menos Ramos y Resurrección deben serlo, no deben girarse ni detenerse, ni volverse ante nada que no sea otra imagen o el Santísimo. En eso concordarmos todos. La saeta es espontanea, sale del alma, es breve, y si rompe el silencio en esta Salamanca plateresca, no es para importar nada ajeno. Soledad se hace con el pensamiento y la voz de todos nosotros, cuando se escucha su comienzo. Por eso seguimos mirando al Cristo de la Luz, y escuchando su voz en el Corrillo. De soledad solo necesitamos su cantar, su dicrección, su saber está. Canta vestida de negro. No hace falta mas descripción.

6 comentarios:

Alberto dijo...

Interesante reflexión. Habrá que esperar al Lunes Santo para ver que tal me encaja...

S De Música dijo...

Te encajara bien querido Conchero... teniene sentido y raíz. Pero como en todas partes, hay quien quiere cantar porque "le sale" y quien quiere cantar para lucirse: Soledad canta todos los años en los mismos sitios. Doctrinos, en las Conchas, Estudiantes, en el Corrillo (desde balcón) Lágrimas, a la Salida... etc

Lucano dijo...

Desde la espontaneidad, las respeto, sin que me entusiasmen, pues son oraciones; conocidas de antemano, me dejan de parecerlo. Eso sí, en Salamanca han tenido su lugar y siguen teniéndolo.

Iacobus dijo...

La saeta es oracion cantada que sale y debe salir del corazón.
¿Salamanca es tierra de saetas? permiteme la duda.
Respetada pero no compartida cuando lo que se busca es el protagonismo del cantaor y se paran los pasos para mayor regocijo del "buscador del aplauso".
Saeta si, pero cuando la procesión lo permita, no para todas y nunca delante de las camaras, pues da la sensación de buscar el reconocimiento del "artista" y por supesto una oración distinta para cada imagen nunca la misma cambiando la advocación como alguno hace últimamente.
Saludos.

Anónimo dijo...

Completamente de acuerdo contigo, Antonio. Yo fui durante mucho tiempo una "purista" y "pureta". Hasta que mi propia madre me dijo que cuando era niña a la Soledad le cantaban saetas. Sí, a nuestra Soledad, la Sole, la más sencilla, la más zamorana. Incluso documentos históricos de los años 30 mostraban el malestar del jefe de paso por tener que detenerse cuando alguien le cantaba a la Virgen. Personalmente, no le veo mucho sentido en Zamora. Pero no todo es blanco ni todo es negro. No seré jamás yo la que mande callar a alguien que movido por la devoción, por la emoción o por la propia vivencia de otras Semanas Santas mande callar a quien eleve su voz ante uno de mis Cristos o de mis Vírgenes. Las cosas, cuando salen del alma, son todas válidas. Y tanto vale nuestro silencio como su canto hondo, si existe un trasfondo que nos une. Yo me quedo con mi silencio pero eso: nunca mataré al mensajero, como nunca mandaré callar al cantor.

S De Música dijo...

Cierto es lo que cuentas.

A mi me vale que alguien cante cada año en su mismo balcón, ma misma calle o la misma cuesta. No me vale que se busque el aplauso y el enfoque de la cámara...